Chequeo Cardiológico Deportivo
El deporte es beneficioso para el organismo y, en especial, para el corazón siempre y cuando se realice de forma adecuada y en la intensidad justa. Para comprobar la capacidad de nuestro sistema cardiovascular durante la práctica de deporte es necesario realizar un chequeo cardiológico deportivo.
- Los deportistas, excepto los de alta competición, deben realizarse estos chequeos cada 2-5 años
- El objetivo no es sólo tratar problemas cardíacos derivados del deporte, sino prevenirlos
- La prueba de esfuerzo permite conocer la respuesta del corazón ante la presión
Prevenir riesgos de la rutina deportiva
La práctica de actividad física aporta innegables beneficios cardiovasculares siempre y cuando se realicen con la intensidad adecuada. La cardiología deportiva permite detectar enfermedades del corazón que pueden agravarse por realizar un deporte de manera inadecuada.
Por ello, este chequeo se ha convertido en una herramienta básica para que los deportistas puedan conocer en qué estado de salud se encuentra su corazón, adaptar su rutina física y prevenir riesgos asociados a una práctica deportiva errónea. Además, al conocer los resultados permite a éste potenciar su rendimiento.
En qué consiste el chequeo cardiológico deportivo
El chequeo cardiológico deportivo consiste en realizar una consulta con el cardiólogo quien, tras una exploración física inicial, realizará determinadas pruebas. En primer lugar comprobará los niveles de la tensión arterial, tanto en reposo como realizando un esfuerzo.
A continuación se lleva a cabo un electrocardiograma y un ecocardiograma doppler color. El primero es una prueba que registra la actividad eléctrica del corazón que se produce en cada latido cardiaco. El segundo permite ver el corazón en movimiento (latiendo) en tiempo real. A estas pruebas se añade la prueba de esfuerzo y un informe médico completo.
Prueba de esfuerzo
La prueba de esfuerzo o ergometría permite al cardiólogo analizar cómo responde el corazón cuando se enfrenta a un esfuerzo. De esta forma se logran detectar anginas o arritmias o identificar cambios en el ritmo cardíaco durante el ejercicio.
Para la realización de la prueba el técnico coloca electrodos en el pecho del paciente que, conectados a un monitor, analizan la actividad eléctrica del corazón mientras éste camina en una cinta eléctrica o pedalea sobre una bicicleta estática. Durante el tiempo de la prueba se mide la actividad del corazón con un electrocardiograma y se controla la tensión arterial.
Cuándo se debe realizar un chequeo cardiológico deportivo
Los profesionales de alta competición deben realizar estos chequeos con mayor regularidad. Sin embargo, el resto de la población que realice actividades menos intensas y según el criterio del cardiólogo, deberán realizarse chequeos cardiológicos deportivos cada 2 – 5 años.
Este chequeo está especialmente indicado para todas las personas que realizan ejercicio con regularidad, especialmente:
- Jóvenes a partir de 12 años que practican deportes de competición
- Deportistas que realizan una actividad regular de intensa a moderada alta (gimnasio, competiciones…)
- Aquellos con patologías cardiovasculares o con factores de riesgo que comiencen o realizan deporte regularmente
- Deportistas federados mayores de 35 años
- Deportistas de alta competición