El estudio de la arritmia cardíaca se realiza para diagnosticar y estudiar las alteraciones del ritmo cardíaco. El resultado obtenido de esta prueba permite conocer el tipo y gravedad de las mismas, el lugar donde se originan en el corazón y los trastornos que producen, así el cardiólogo se orienta sobre el tratamiento más efectivo.
Por lo general, estas pruebas se realizan en pacientes que han sufrido palpitaciones, taquicardias, mareos o pérdidas de conocimiento.
“El estudio de la arritmia puede durar entre 1 y 7 horas”
Antes de comenzar a realizar el estudio electrofisiológico el paciente debe estar durante 6 horas en ayuno. Una vez en la sala, “el paciente debe permanecer tumbado durante todo el proceso, que puede tener una duración variable de entre 1 y 7 horas, según la complejidad de la arritmia y el lugar donde aparezca”, comenta el Dr. Federico Segura, cardiólogo en Cardiavant.
En todo momento, el paciente estará conectado a un sistema que mide las señales eléctricas del corazón, lo que permite un mayor control y detección de la alteración cardíaca.
Esta prueba se realiza a través de una punción venosa en la ingle por la que se introducirán los electro catéteres. “Éstos se colocan en determinadas partes del corazón y mediante el uso de un marcapasos externo se va sobre estimulando el corazón para inducir la misma”, explica el doctor.
Una vez que ha aparecido la arritmia, el objetivo es comprobar qué circuito la original e introducir otro catéter para quemar las zonas patológicas y curar así la arritmia.
“El circuito se quema habitualmente con radiofrecuencia, es decir, mediante energía eléctrica se produce una quemadura que corrige la arritmia”, puntualiza el Dr. Segura.
Además, indica que el éxito de este estudio puede lograr en torno al 70-95% de curación dependiendo del tipo de arritmia y de su localización en el corazón.