La insuficiencia venosa es una afección que afecta a un gran número de personas en la actualidad, cerca del 40% de la población española. El estilo de vida y la predisposición genética de cada persona son factores de peso para su aparición.
El Dr. Airam Betancor, cirujano vascular de Cardiavant, explica que para la eliminación de las varices o venas varicosas “existen muchísimos tratamientos y hay que diferenciar bien las microvarices de las macrovarices” porque tienen tratamientos muy diferentes.
Para diferenciarlas es necesario realizar un diagnóstico correcto y, para ello, se utiliza “el ecodoppler venoso, una prueba no invasiva que consiste en una ecografía de las piernas con la que estudiamos el sistema venoso superficial, las venas safenas, y el sistema venoso profundo” afirma el cirujano vascular y hace hincapié en la importancia de “estudiar el diámetro de las venas safenas y las varices que estamos viendo en el paciente para saber de cuál de las dos venas safenas depende”.
En cuanto a cómo se tratan las varices de pequeño tamaño, las denominadas microvarices, “tenemos un espectro de tratamientos que van desde el láser para las varices muy finitas y aisladas hasta la esclerosis con líquido y la esclerosis con espuma o microespuma para las que son en torno a uno o tres milímetros y suelen estar más agrupadas” apunta el especialista. Estos tratamientos “se realizan en consulta y no son cirugías sino procedimientos terapéuticos” que se llevan a cabo “a través de punción sin anestesia de manera indolora y sin variar para nada el estilo de vida del paciente” señala.
Por otro lado tenemos el tratamiento de las macrovarices, que son aquellas “varices de más de tres milímetros que hacen prominencia en la piel y cuando hacemos el ecodoppler a ese paciente vemos que esa variz depende del reflujo de una de las venas safenas” explica. De esta manera, el Dr. Betancor señala que “el tratamiento consiste en tratar las varices que son el afluente de la safena, y tratar también el origen del problema que es esa vena safena refluyente”.
Sin embargo, aunque el objetivo del tratamiento es el mismo “el modo que tenemos para tratar la safena es lo que varía hoy en día” ya que “clásicamente se recurría al stripping o safenectomía que es extirpar la vena safena desde la ingle hasta el tobillo o desde la parte posterior de al rodilla hasta el tendón de Aquiles” apunta.
Esta es “la técnica quirúrgica más realizada sobre las varices, la cirugía más practicada en el mundo, la más conocida y la más antigua” aunque también es “la técnica más invasiva porque es una cirugía abierta y hay posibilidad de dañar estructuras nerviosas”. Este tratamiento de las macrovarices se realiza “con anestesia epidural generalmente y lleva un corte a diferentes niveles de las piernas” mientras que hoy en día “frente a esa técnica han ido apareciendo una serie de técnicas menos invasivas hasta llegar a anestesias de tipo local” que son tratamiento menos agresivos y más seguros para la eliminación de las varices de gran tamaño.